11 de noviembre de 2013

¿Atrapados en la red?, de Carlos Eduardo Paredes



Debido a la productividad del mar peruano, la actividad pesquera debería haberse beneficiado de una renta significativa. Sin embargo, en el caso de la anchoveta, una normativa inadecuada promovió una sobreinversión y conllevó a grandes sobrecostos, con la cual gran parte de la renta marina se disipó y “hundió” en el mar. 

En el 2008, con el Derecho Legislativo Nº. 1084, se inició el mayor reordenamiento de los últimos 40 años. Esta norma introdujo cuotas individuales de pesca de anchoveta, generando una serie de beneficios. 

La investigación provee un balance de la aplicación de este régimen y analiza la conveniencia de expandir este tipo de gestión pesquera a otras tres grandes pesquerías del Perú (pota, jurel, y caballa), y los efectos que trajo en el caso de la merluza. Analiza también los derechos de pesca que se pagan en el Perú y concluye explicando por qué el sistema vigente debe ser reformado íntegramente.